La maternidad de la A a la Z: Pudor

Pudor es una de las palabras que me parece cambia radicalmente cuando decides ser madre.

Pudor definido como recato, la protección de la intimidad de cada persona. En wikipwdia dice "Según la concepción de Aristóteles y Tomás de Aquino, la falta de pudor se relaciona con la falta de vergüenza"

La historia de mi pudor, o la pérdida de él comienza desde que quedé embarazada y es que en ese momento decidí ir con ginecólogo hombre... y me disculparás, pero siempre pensé que NUNCA eligiría quitarme la ropa interior con un hombre al que no amara, mi ginecólogo debía ser mujer, sin embargo ante la escasez de mujeres ginecólogas a favor de los partos, pues no tuve elección, así que en el momento que me dijo que si me podía hacer un eco vaginal, pues me la quité la ropa interior sin reparo.

Después fui a un curso de educación perinatal en donde alguna vez nos enseñaron vídeos de partos, inclusive, en alguna ocasión fue una pareja a mostrarnos su video, platicar sobre su experiencia y contestar nuestras preguntas... ese día me dije: "no es que tenga nada de malo, pero YO NO voy a mostrar mi video frente a un montón de personas desconocidas, es mi intimidad ¡¡TENGO PUDOR!!", pero estas palabras también me las tragué, te lo cuento mas adelante.

Al nacimiento de Darío acudieron: mi marido, mi doula, mi ginecólogo y el futuro pediatra de mi hijo;  todos ellos me acompañaron mientras estaba en la tina de agua tibia pariendo completamente desnuda, y ¿creen que en algo me importó? Pues no, no me importo en lo más mínimo ¿quien tiene tiempo de pensar en eso mientras estas pariendo?

A los 10 minutos después de que nació Darío entraron a la sala de LPR mi madre, mis hermanos, mi suegra y mi cuñada y ¿crees que me importó recibirlos con el torso descubierto, los pechos al aire amamantando a mi bebé recién nacido? Pues claro que no y tampoco me importaron las fotos tomadas... nada, el pudor se fue, se fue porque ADEMÁS estuve orgullosa de mostrarme así.

A partir de ese momento el mostrar mis pechos no fue tan terrible, y no me mal entiendas, no quiero decir que yo andaba de exhibicionista, sino que si había que amamantar, pues había que hacerlo: los bebés no esperan y no les importa donde estés. La verdad es que siempre lo hice tan natural que creo que pocas veces alguien, si quiera, se dio cuenta de lo que estaba pasando aún cuando nunca usé nada para taparme (Darío odiaba los tapujos), pero recuerdo una sola vez en un centro comercial que si hubo una mujer que me vio como si yo estuviera haciendo algo terrible, para ser sincera sentí lástima ¿quien puede ver algo malo en amamantar un bebé?

Pues ya nacido Darío y teniendo quizá un par de meses me invitaron del lugar en donde tomé el curso de educación Perinatal que mencioné antes y me invitaron a mostrar mi video y a platicar mi experiencia y allá voy, en ese momento ya no veía nada malo en mostrar mi parto y menos de hablar sobre él aún fueran desconocidos.

Toda madre sabe que no puede desaparecer de la vista de su crío, a ellos no les importa ti tienes que ir al baño, así que la puerta del baño dejo de estar cerrada, claro que no cuando hay visitas, pero si solo estamos nosotros, la puerta no se cierra (por eso me asombra que ahora Darío quiera la puerta cerrada del baño cuando ÉL va al baño y no me deja quedarme ahí, pero cuando yo voy él puede abrir la puerta cuando quiera, así es esto)

Pero no te preocupes, si estas en esta etapa, es solo eso: una etapa, el pudor vuelve y un día dejas de amamantar y espero que un día nadie abra la puerta del baño, claro que en este punto en que el pudor regresa es cuando quieres otro bebé y entonces el cuento vuelve a empezar.

Besos
Yuria Prospero