Quiero contarles mi experiencia en cuanto a la lactancia y para esto es importante hablar de mi abuela.
Mi abuela, española de nacimiento, mexicana por destino. Llegó a México durante la guerra española junto con sus padres y hermanos y aquí hizo su vida. En algún momento tuvo la oportunidad de convertirse en una de las primeras educadoras perinatales del país y así lo hizo.
Mi abuela vino a vivir con nosotros desde que yo tenía 6 ó 7 años. Hubo un tiempo en que ella trabajaba en casa, entonces vi desfilar muchas mujeres embarazadas y SIEMPRE fueron parte de mi vocabulario palabras como PARTO y LACTANCIA. Nunca pensé en tener un hijo por otro medio que no fuera un parto natural, para mi era lo normal, lo que debía ser. Mi madre tuvo 3 hijos sin una gota de anestesia, ¿porque mi parto iba a ser diferente?
Lo mismo pasó con la lactancia, mi madre nos amamantó, mi abuela decía que era lo mejor, ¿porque no iba yo a amamantar?
Recuerdo que mientras estaba embarazada imaginaba a mi bebé en brazos y me parecía maravillosa la idea que mi cuerpo hiciera el alimento que ese pequeño ser necesitaba. La realidad no distó mucho de esto, amamanté a Darío desde el primer momento que lo tuve en brazos, fue una lactancia exitosa, con apenas una pequeña grieta causad por el estreno de uno de mis pezones (ni modo, nunca habían sido usados para amamantar, para lo que fueron creados) y que sanó rápidamente.
Amamanté por 4 años y algunos meses, si leíste bien, 4 años... desde que comencé esta aventura decidí respetar el tiempo de Darío y lo hice, él se destetó solo.
¿Cual creo que fue el éxito de tantos años de lactancia? Creo desde mi corazón que la razón fue que SIEMPRE escuché que todas las mujeres podíamos y debíamos amamantar, que era lo mejor. Comí, jugué, dormí, hice tarea con esta conversación, era el día a día, era el desfile de las tardes y se quedó plasmado en mi corazón.
Ojalá todas las mujeres creyéramos en nuestras capacidades y en la capacidad de amamantar. Ojalá todas las mujeres y hombres estuviéramos seguros que es lo mejor para nuestros hijos (porque si el apoyo de tu pareja, esto es muy difícil).
Por esto en esta semana mundial de la lactancia quise contarles mi experiencia, quiero contribuir a que mas mujeres creamos en nosotras y nos entreguemos a la maternidad y la lactancia y ayudemos a tener un mejor mundo, para nosotras, para nuestros hijos.
Si estas embarazada infórmate, si quieres amamantar acércate a algún club de lactancia o a la Liga de la Leche de tu localidad, seguro encontrarás la ayuda y el apoyo que necesitas.
Te deseo una lactancia prolongada
Un abrazo
Yuria Prospero
No hay comentarios:
Publicar un comentario